Cuando se han portado bien o han tenido un buen gesto no está de más agradecérselo con un refuerzo positivo. En el caso de los perros bull terrier miniatura, premiarlos cuando han hecho algo bien les ayudará a mejorar su comportamiento y a saber cómo comportarse. Para ello, debemos ser muy cuidadosos tanto en las formas como en la frecuencia a la hora de premiarlos pues, de lo contrario, podemos crear un comportamiento contrario al que pretendíamos. De este modo, saber cómo y cuándo premiar a nuestro perro bull terrier miniatura cuando ha hecho algo bien es un aliciente para que este siga con su aprendizaje.
En este nuevo artículo de Costa Cabana os ayudaremos a conocer la mejor manera de proceder a la hora de premiar a vuestro pequeño bull terrier mini, así como, en qué momentos se debe hacer y en cuáles no es recomendable. Gracias a estos consejos podréis saber mucho mejor cómo tratar a vuestro compañero de vida en según qué circunstancias a la vez que obsequiar solo en determinados momentos o situaciones.
Con el objetivo de reforzar comportamientos positivos en los perros desde un punto de vista instructivo y educativo, premiar a nuestros amigos cuando hacen algo bien es la mejor forma de que estos sigan por el buen camino. Pasar más tiempo con ellos, alargar más el momento del paseo u obsequiarles con una rica galleta o similar pueden ser estímulos muy positivos que sin duda nuestros perros bull terrier miniatura agradecerán de buen modo.
Premiarlo cuando realmente lo merece y no cada vez que este lo considere es un hecho que puede ayudar a evitar un mal comportamiento del bull terrier mini cuando ve que no obtiene lo que quiere. Saber cuándo debemos hacerlo y en su justa medida es la mejor forma de reforzar las actitudes positivas en el perro y desarrollar un buen comportamiento. Por eso, se debe premiar solo cuando se realiza un buen gesto y con la intención de que el perro lo repita e interiorice a partir de ese momento. Por poner algunos ejemplos, puede ser cuando este es pequeño y ha hecho sus necesidades en donde debe, cuando nos hace caso ante una orden o bien cuando se comporta bien delante de otras personas.
En los momentos en donde no se debe premiar ni reconocer la actitud del bull terrier miniatura es cuando sus actos implican una molestia para terceros como, por ejemplo, cuando abusa de los ladridos, muerde objetos o es demasiado bruto ante algunas personas. Si pecamos de premiar este tipo de actitudes provocaremos precisamente el efecto contrario y que el perro bull terrier miniatura, lejos de erradicarlas, las siga repitiendo una y otra vez pues no las ve como un comportamiento negativo o libre de ser reprochable.